Ingredientes: un puñado de judías pintas o rojas por persona y un par más para repetir, panceta, 1 chorizo, 1 morcilla, 1 cebolla, 2 zanahorias, 4 patatas, 4 tomates grandes, 1 vaso de fino, 1 pimiento choricero,1l de caldo de pollo, 2 vasos de agua, sal, pimienta y 2 hojitas de laurel.
Ponemos a remojo las judías la noche anterior.
Cortamos la cebolla y las zanahorias y las ponemos a rehogar en una olla con aceite de oliva a fuego medio, lo salpimentamos y mientras vamos cortando el tomate ( podemos rallarlo si lo preferís). Cuando ya esté doradura la cebolla añadimos el tomate y una pox quita más de sal y removemos. Vamos pelando las patatas y las reservamos en agua sin cortar.
Troceamos la panceta y la incorporamos junto con el vino blanco y la carne del pimiento choricero. Pasado unos minutos echamos las judías y vamos incorporando las patatas rompiéndolas con el cuchillo para q suelten el almidón.
Es ahora cuando ponemos el caldo de pollo y dejamos q se vayan haciendo con mucha paciencia. El agua es para ir añadiendo según se vaya evaporando el caldo. Es importante q nos queden espesas no tienen que quedar caldosas.
Cuando las judías estén blandas es cuando le damos el último toque añadiendo el chorizo y la morcilla; removemos todo bien para que suelten su jugo y se mezclen los sabores y nos quedan unas judías para chuparse los dedos.